Capítulo 24

Por la mañana, por favor no me podía creer tenia un montón de sueño, podría haber habido una guerra y yo sin despertarme, hasta que el sin vergüenza de Will vino al cuarto con un vaso de agua y tirárnoslo a Carla y a mi

-Desgraciado, infeliz-le dije chillando- te fuiste ahora-le exigí, se fue riéndose  (idiota)

-Idiota-murmuro Carla tapándose con la almohada

-Carla, levanta-le dije- hoy es tu nuevo día de instituto

-Agggg, no podía ser otro día-dijo quejándose, y levantándose hacia el baño

Me vestí con lo que primero vi unos vaqueros y una sudadera, en realidad ese no era mi estilo, lo usaba solo para educación física, pero que mas da solo es por un día. Bajé hacia la cocina y vi a Will allí hablando con Adrián ¿Qué hacia aquí tan pronto?

-Buenos días-dije

-Hola amor-dijo acercándose- ¿no me vas a dar un beso?

-¿Recuerdas que estas castigado mi vida?-dije acercándome mas hacia él, podía sentir su aliento y en ese momento me alejé haciéndole quedar con las ganas de besarme, que mala que soy…,

-Pero que malvada ¿no lo podías olvidar? Claro la señorita va y me deja sin beso

-No, no lo podía olvidar uno por que me gusta ver tu cara de atontado cuando te voy a besar y dos pues…no se…a si….porque me da la gana-digo con una radiante sonrisa en mi cara

-Adrián déjala que es una chicas y ya sabes como son las chicas…-dice Will

-Will, primito mio podrías de dejar de meterte en conversaciones que no te interesan y ponte a buscar amigos porque los que tienen  no me gustan-digo con malagana, aún recuerdo lo que paso ayer por la noche y ese estúpido.

-¿Por qué dices eso Sari?-me pregunta Adrián

-Pues que ayer por la noche la cotilla de tu novia y Carla entraron a espiar en mi habitación, yo estaba hablando con un amigo y a Sara no le cae bien

-Bueno como sea, y tu come que llegaremos tarde-me dice Adrián

-¡Caaaaarlaaaa!-digo gritando-¡baja que llegamos tarde!

-Voy-la escuche que decía

Cogió leche y cereales, empezó a comer muy deprisa

-¿Por qué me miráis asi?-dijo Carla

-Es que estas…muy b…

-Que estas preciosa Carla-dije de repente para callar a la boca de Will ¿no podía ser mas romántico? Pero mi primito tonto tenia que decir con palabras muy fuertes que estaba muy buena.

-Muchas gracias

-Daos prisa tenemos veinte minutos para llegar al instituto

Salimos corriendo como diablos que llevan el viento, o como se a mi no se me dan bien los refranes. En el camino se nos unió Luisa y Ángel

-Mis amores venís muy pronto hoy-dice Cris

¿Qué hora es?

-Pero si nos hemos dado un montón de prisa y tenemos como unos trece minutos-dice Carla, protestando

-Bien, pues Carla tienes que ir a buscar tu horario en secretaría

-Enseguida mi sargento-me dijo y se fue

-¡Muy graciosa! –digo gritándola

-Bien hoy es viernes acordaos hoy por la noche fiesta en mi casa, es la bienvenida de Carla

-¿Les pediste permiso a tus padres?-me dice Will

-Si, me dijeron que todo iba bien mientras que no rompieran nada, y que habría unos dos vigilante que controlarían pero nadie se dará cuenta

-A ok

-Bueno envío un mensaje a hora no se que pondré a ya sé- y pongo

Hoy a las 23h fiesta de bienvenida de Carla, en mi casa de (Sara) espero que vengáis un beso a todos y todas ♥

Y se empezaron a escuchar sonido de móviles en todas partes. Y me contestaron genial ahora tendré que apagar el, móvil para que no suene.

Tocó el timbre y todos salimos corriendo hacia nuestras aulas a primera hora tenía biología y me tocaba justamente con Carla y Elena.

Al entrar vemos al profesor, por favor que no me ponga retraso por favor

-Señoritas Mendez y García del Valle ¿me podrían decir porque han llegado tarde?

-Pues vera señor profesor nos dirigíamos a este aula cuando nos encontramos a Carla la chica nueva que se había perdido y no encontraba la taquilla y la tuvimos que indicar donde estaba-dijo tranquilamente Elena

-Es ¿eso correcto señorita Carina?-miró el profesor a Carla

-Si señor espero no haber interrumpido a la clase

-Bueno, por ser su primer día no pasa nada pueden ir a sus asientos

-Si, señor-dijimos Elena y yo

-Vaya, por dios, que pesado es el profesor-dijo Carla muy flojito que solo la podíamos escuchar nosotras

-Pero tu ¿no te llamabas Carla?-pregunta Elena

-Si, tengo dos nombre y utilizo mas el de Carla

-A ok

Las clases transcurrieron, pues como todas aburridas, sosas, insoportables que además ¡casi me duermo en clase de química!, hasta que llego el bendito recreo y nos encontramos a todos de nuevo.

-Cio amigos míos-dijo Carla muy feliz ¿Qué le habrá pasado?

-Cuanta felicidad huele por aquí ¿Qué te ha pasado?-Pregunta Elena

-Pues, nada que me he despertado así y eso

-Claro, claro-dice Luisa

-Sara ¿puedo hablar contigo a solas un momento?-huy su tono de voz me asusta ¿Qué me dirá? Me esta asustando mucho

-Claro Adrián

-No me lo puedo creer la pareja mas feliz del grupo va a romper-dice Mariano

-No seas idiota como mucho Adrián se ha enfadado-dice Luisa

-Que no, seguro que le va a regalar algo-dice Cris

-Yo no creo, yo creo que romperán y Adrián se fugará con Melisa la rubia esa-dice Luis a señalando a una chica rubia- y se irán a vivir a Japón tendrán cuatro hijos y serán felices y comerán perdices

-No inventes Luis

Me acabé de levantar, estaba aterrada ¿Qué me dirá? ¿Se fugaría con Melisa a  Japón y tendrían cinco hijos? No, no puede ser esto no me puede estar pasando a mi, el no, el me quiere, o eso creo, no me podría hacer esto no, ¿romperá conmigo? Muchas preguntas pasaban por mi cabeza y cada una era pero.

Nos dirigimos hacia un árbol bastante cerca de nuestro amigos que nos observaban curiosos y de repente, pumba,  me besa. Al principio me quede en estado de shock pero después reaccione y le besé, fue un beso suave y dulce, pero después se fue convirtiendo en un beso lleno de pasión, mi corazón latía desenfrenado con deseo de él, sentía su pecho que iba a mi por hora, empecé a poner mi mano sobre la nuca y comencé a estirar de su pelo suave. Me cogió de la cintura acercándome mas a él, en ese momento se me olvidaba que estaba en el patio de mi instituto, hasta que unos chicos de segundo de bachiller empezaron a silbar, me fui separando de él avergonzada.

-Te quiero-me dijo en un susurro en mi oreja, s eme erizó todo mi cuerpo al sentir su aliento en mi oreja

Me tuve que poner de puntillas para decirle-y yo también te quiero- cuando nos separamos noté que mis mejillas ardían como nunca lo habían hecho, y su cara estaba igual como la mía y tenía un brillo en sus ojos marrones que nunca había visto hasta ahora. Nos fuimos acercando hacia la mesa donde estábamos.

-¿Qué tal pareja?-no dijo Ángel con una cara pícara

-Ángel, no hace que preguntes, mira su cara-dice Elena

-Es verdad, se ve que necesitaban  una habitación con un colchó y ya todos nos imaginamos lo que pasaría-dice Mariano

-Idiota-le dije y le pegue un pequeño golpe en la cabeza.

Auch se quejó Mariano, bien merecido que se lo tenía, pero si hubiéramos estado en una habitación ¿hubiéramos llegado a más lejos?

-Mariano, cuidado con lo que hablas que es mi prima-dice Will, hay este chico me encanta, pero es bastante protector.

Me quedé pensativa durante el resto del recreo, ¿llegaríamos tan lejos Adrián y yo? No lo sé. Ahora tenía Matemáticas, con Seth haber que me dirá hoy este chico.

-¡Seth!-le grite desde el pasillo, pero no me escucho y se alejó, al llegar a mi aula lo vi allí sentado, que simpático que era este chico. Pero cuando me quise dar cuenta todas las mesas estaban separadas y aggg se me había olvidado que hoy teníamos examen de mates, bueno me sé algunas formulas pero no sé si bastan ojalá que si porque si no me muero. De pequeña se me daban mal las matemáticas y hasta un que un día decidí que tenía que cambiar y lo hice empecé a mejorar, ¿Por qué  cuento esto? Ni idea, cada día estoy pero, se me va la cabeza. El examen duraba cincuenta minutos y menos mal que era súper fácil este examen.

Seth…

Al comenzar el recreo decidí ir antes a la biblioteca para consultar una cosa de biología, estuve allí unos cinco minutos y nada más odiaba el silencio, no me gustaba nada y salí corriendo al patio allí me encontré a todos a Elena, Cristina, Ángel, Luis, Luisa etc.  Es un montón ese grupo, pero no veía a Sara y a Adrián por ningún lado ¿Dónde estaban? Me fije que sus amigos miraban hacia el fondo y allí estaba a la mujer que quería en manos de otro tipo, en ese momento me quise morir, se estaban besando con mucha ternura y se notaba que estaban enamorados, en ese momento me di cuenta que yo sobraba. Tenía que ver con otros ojos a Sara y no hablar con ella tanto como lo hacia antes.

Pero creo que hoy todo esta en mi contra y después del patio tengo matemáticas con ella ¿¡que voy a hacer!? Me odio a mi mismo enamorarme de una chica y yo no soy correspondido. ¿Qué tenia Adrián que no tenga yo? A sí se me olvidaba a Sara.

Me quede parado un buen rato allí hasta que sonó el timbre y me tenía que ir al examen de matemáticas, ahora no estoy en condiciones de hacer un maldito examen. Escuche unas voces y procedían de Sara la ignoré y me fui corriendo. Al llegar noté húmeda mi cara, ¿era posible que había llorado? ¿Cuándo? Tenia la esperanza de estar muy lejos de ella pero no el maldito profesor nos tubo que cambiar y a mí ponerme detrás de ella. Teníamos cincuenta minutos para hacer ese examen, se me hicieron los minutos mas largo de mi vida al terminar el examen, estaba recogiendo mis cosas cuando Sara me dice:

-¿Qué tal el examen?-me dijo con esa sonrisa tan encantadora que tenia, se parecía a un ángel caído del cielo, sé que soy cursi otros pensarían que soy gay pero no yo soy un chico romántico y eso era precisamente lo que les gustaba a las chicas , no se porque os lo he contado pero no importa.

-Pues bastante bien ¿Y a ti?

-No ha estado mas ¿hoy vienes a la fiesta en mi casa?-me preguntó, no sabía si ir o no ir pero…no sé

-Pues, creo que no podré ir porque tengo otras cosas que hacer…-dije intentando que me creyera, izo una mueca de desagrado

-Venga, ven hazlo por mi aunque sea pásate un rato y después de vas ¿si?-¿Cómo podía decir que no, a aquella chica tan encantador?

-Claro, ya veré la forma de ir

-Muchas gracias Seth-me dio dos besos que me hicieron sonrojar, y vaya sus labios eran suaves y delicados…-Me tengo que ir, a preparar todo, guardar objetos, quitar la alfombra y muchas cosas más, para hacer una fiesta las cosas que se tienen que hacer, que horror solo pensarlo y ya me canso, bueno adiós nos vemos en la fiesta- no me dio tiempo a contestarla, ya que se fue muy rápido

¿

Iría o no a la fiesta? Soy estúpido, soy el rey de los estúpidos. Se me había olvidado que tenia que hablar menos con Sara y voy y le hablo. Creo que ignorar a Sara será más difícil.

Ya se lo que voy a hacer, iré a la fiesta, quiero ver lo que pasa, y será la última vez que sufra por un amor no correspondido, lo pero es que es la segunda vez que me pasa, pero en diferentes circunstancias. Tenía catorce o quince años, yo iba a clases de guitarra con mi mejor amigo, había una chica que me gustaba y a ella yo también le gustaba, lo peor fue que a mi amigo estaba enamoradísimo de ella entonces me tuve que apartar para que mi amigo estuviera contento. La historia di mi vida todas las chicas que me gustan no pueden estar conmigo que es estúpido. En fin, tengo que acostumbrarme estas cosas pasan continuamente y sobretodo a mí.

Sara…

Llegue a mi cas loa antes posible, tenía que prepara la fiesta y claro tenía que llevarme a Carla y Will conmigo claro, se supone que ellos me tiene que ayudar o sino les obligo. Mis padres me dieron reglas, primero que no se rompa nada y no se ensucie nada, segundo limpiar todo y  dejarlo como si no hubiera pasado nada eso sería lo mas difícil pero bueno y ya esta.

-Haber hay que organizar una fiesta en seis horas, hay que mover muebles y dejar todo despejado par la sala de baile y todavía no tengo ningún vestido que ponerme y estoy muy estresada y…..

-Sssshhh Sara tranquila yo te ayudo he llamado a Luis y a Ángel para que vinieran a mover los mueble y poner las sillas, y tu puedes ir con tus amigas máximo dos horas para tu vestido y tienes que venir a decorar esto no puede quedar tan soso- dijo Will, se le dan bien montar fiestas ¿de donde había aprendido?

-Gracias primito mío me has salvado la vida, si quieres puedo llamar a Adrián para que os ayude

-No Sari se lo pregunté pero no podía venir a ayudar por que tenia que hacer no se que cosa

-Bueno esta bien, Sara vamos a comer algo rápido-dice Carla

-Bueno ¿Qué comemos?

-Mira aquí hay una nota-dice Will

-Haber dámela dice:
   Hija, te pedimos que seas responsable con la fiesta dile a Will que te cuide porque el ahora esta cuidándote, confiamos en los dos los guardias vendrán a las once y cuarto y bueno espero que se los pasen bien con cuidado os queremos mucho y a ti también Carla

-Que tiernos-dice Carla

-Si mucho, bueno venga vamos a montar la fiesta…

Riiiiiiiiiiiiing

-El timbre ¿Quién será? ¿esperáis a alguien?-pregunto yo

-No

-Yo tampoco

Abro y veo a un mensajero

-¿Perdone aquí vive la señora Mendez?

-Señorita Mendez-le corrijo este chico me suena pero de que?

-Bueno, señorita Mendez tiene que firmar aquí ya esta

-Perdona, yo te he visto en otro sitio tu….tu….eres….emmm….a si eres el chico de la tienda, el chico que estaba ligando con mi una amiga mía

-No, creo yo no soy bueno es mi hermano somos gemelos y nos confunden a menudo

-Ah bueno dile que se pase hoy a las once  que hay una fiesta y si quieres tu también puedes venir

-Si se lo diré, toma tu paquete

-Gracias, hasta pronto-le digo despidiéndome

-¿Quién era?- me pregunta Carla

-Un chico, ya te lo contaré después

-A ok, y ¿ese paquete?-dice señalando a la caja

-Ni idea pero venga voy a abrirlo

Riiiiiiiiiiiiing

-Otra vez el timbre-digo quejándome- Will ves a abrir

-Voy, peros si tu estas mas cerca

-Es que no me da la gana abrir

-Que bien ¿no? – pasa por mi lado y me despeina y  me deja el pelo como los de una bruja

-¡Idiota!

-Hola, pasad-dice Will

-Sara ¿te ha mordido un perro en la cabeza?

-Cállate, que ha sido por culpa de mi insoportable primo

-Bueno como sea comencemos a ordenar esto para que se vea con aspecto a una fiesta-dice Ángel, se fueron hacia el sótano

-Venga ábrelo-me insistía Carla

Abro con mucho cuidado la caja y me quedo muda por la impresión y la felicidad inunda mi rostro.